La Inteligencia Artificial (IA) evoluciona a pasos agigantados, ayudando a los sectores productivos a resolver diversos desafíos. Dentro de todas las aplicaciones posibles de esta tecnología, una de las más valoradas por las organizaciones es aquella vinculada al credit scoring.
La gestión del riesgo es uno de los principales desafíos de las organizaciones, ya que una evaluación inadecuada de la capacidad de pago de un individuo o empresa puede acarrear serios inconvenientes económicos para los organismos de crédito.
Utilizando algoritmos que permiten analizar grandes volúmenes de datos, la Inteligencia Artificial brinda evaluaciones de score crediticio confiables y personalizadas que reducen el riesgo y los índices de morosidad.
Credit scoring en la Open Economy
El score de crédito, o credit scoring, es un sistema utilizado para calificar el otorgamiento de créditos, tomando decisiones orientadas a prevenir o disminuir el riesgo de morosidad. Su objetivo es analizar la situación crediticia de un individuo u organización para determinar su solvencia y capacidad de repago.
Tradicionalmente, el scoring estaba determinado por la información que proveían los bureaus de crédito a través de la recopilación de datos de bancos, organismos estatales y padrones de datos públicos. Con estos registros, se creaban modelos de riesgo basados en el historial crediticio y se asignaba un puntaje a cada solicitante.
No obstante, este modelo se torna obsoleto si tenemos en cuenta que en el mundo hay más de 1.4 billones de personas que no están bancarizadas. Para resolver esta problemática y democratizar el acceso al crédito surge el concepto de Open Economy.
La economía abierta se basa en la recolección y el análisis de grandes volúmenes de datos (no solamente aquellos que tiene que ver con el historial crediticio) para determinar si es conveniente ofrecer crédito a una persona o empresa o si, por el contrario, existe una alta probabilidad de morosidad derivada de su falta de solvencia.
En la Open Economy, el credit scoring se lleva a cabo por medio de la evaluación de datos provistos por instituciones financieras y otros actores sociales y económicos, como, por ejemplo, instituciones educativas, organismos públicos, autoridades fiscales y redes sociales.
Pero, ¿cómo se puede analizar este gran cúmulo de información? ¿Qué herramientas necesitan implementar las instituciones de crédito para tomar decisiones que reduzcan el riesgo? Es aquí cuando la Inteligencia Artificial entra en escena.
Inteligencia Artificial, la clave para un score de crédito exitoso y abarcativo
Además de ayudar a prevenir el fraude, la Inteligencia Artificial es un elemento fundamental para realizar un credit scoring fiable que refleje la verdadera capacidad de pago de las personas e individuos, contribuyendo a la ampliación del acceso al crédito.
La calificación crediticia basada en IA evalúa hasta qué punto el cliente puede pagar su deuda basándose en datos diversos como ingresos totales, historial crediticio, análisis de transacciones, experiencia laboral y evaluación del comportamiento del usuario, entre otros.
Una vez recabada esta información, la Inteligencia Artificial construye una puntuación crediticia a través de modelos matemáticos basados en métodos y cálculos estadísticos. Como resultado, el scoring realizado con esta tecnología aporta evaluaciones de solvencia económica más precisas e individualizadas gracias al análisis de una variedad de factores.
Por otro lado, a diferencia de los métodos tradicionales de calificación crediticia que se centran en los resultados pasados del solicitante, el score de crédito hecho mediante IA es más sensible a los indicadores en tiempo real de la solvencia, como el nivel actual de ingresos, las oportunidades de empleo y la capacidad potencial de obtener rentas adicionales. De esta forma, permite realizar predicciones precisas basándose en modelos inteligentes.
Ventajas de aplicar la IA al score de crédito
Lejos de democratizar el acceso al crédito, los motores de decisión basados en métodos tradicionales dificultaban el otorgamiento, excluyendo a miles de personas. Integrar la IA en la calificación crediticia resuelve este inconveniente, aportando numerosas ventajas.
- Mayor acceso al crédito
A diferencia de lo que sucedía en el pasado, gracias al modelo de Open Economy y la utilización de IA, más personas y empresas acceden hoy al crédito, estimulando la economía.
- Personalización y orientación al cliente
Esto permite una mayor segmentación y clasificación de los clientes en términos de riesgo crediticio asociado.
- Rapidez
En síntesis, la aplicación de Inteligencia Artificial al credit scoring aporta ventajas para todas las partes interesadas: los organismos crediticios pueden tomar decisiones basadas en datos y aumentar el número de clientes sin incrementar el riesgo, mientras que los usuarios amplían su acceso al crédito. ¿Quieres saber más sobre el uso de IA en el score crediticio y prevención de la morosidad? Contáctanos.